If we could strip ourselves of all cultural and social structures, languages, clothing, characteristic features, and even traditions; if we shed everything that defines us as individuals, we would find the same innate feelings, emotions, frustrations and fears that we all share due to our human condition. This is what I seek with my paintings. Through Art, I want to inspire that empathic side of the viewer and create a dialogue based on those emotions for those of us who do not share one same language.
My paintings explore complex human life within its simple everyday routine. I travel to different geographical zones, where I experience and capture diverse realities through the portraits of anonymous people going about their daily life and chores. Each artwork focuses on expressing the individual to represent and analyse the whole, creating a sense of self-identification and belonging.
I am particularly interested in ordinary scenes, situations and characters, surrounded by a tangible atmosphere of emotions, (senile ladies, common people doing grocery shopping or having a lunch break; peasant cultures, crowded streets or a small but clearly formed human group going to the temple).
Furthermore, the female figure is the leading character of my work. Women are depicted in their own different realities without the fear of being judged or criticised. Through their daily struggle, they share our own reality. We (women) feel identified and familiar with them as a part of a worldwide feminine force that is globally being silenced. My protagonists are not sensual muses, but sisters and comrades.
ARTIST
Quitándonos estructuras sociales, o culturales, lenguas, vestimentas, rasgos característicos, o incluso tradiciones, si nos despojamos de todo lo que nos construye como personas, nos encontramos con una serie de emociones, sentimientos, frustraciones o miedos innatos, que todos compartimos simplemente por el hecho de ser humanos. Y eso es lo q busco con mi pintura: mediante el arte, fomentar esa nuestra faceta empática y dialogar en base a esas emociones para las que no compartimos idioma.
Mi obra se basa en la representación de la realidad humana inmersa en su cotidianeidad. Me traslado a diferentes partes geográficas y retrato la zona a través de personas anónimas que se encuentran realizando tareas comunes y básicas del día a día. Cada pintura, se centra en lo individual para poder describir y analizar la colectividad creando una sensación inherente de pertenencia.
Me interesan los temas, escenarios y personajes ordinarios (ancianas seniles, individuos haciendo la compra, compartiendo desayuno, calles, templos o mercados abarrotados de gente) donde gracias al uso de lo cotidiano, nos encontramos con un escenario común en el que podemos reflexionar y reflejar circunstancias y problemáticas actuales.
Además, la protagonista indiscutible de la mayor parte de mi obra es la figura femenina. La mujer es representada en sus diferentes realidades sin esperar a ser juzgada, o evaluada, sino que a través de su rutina se une con la nuestra, sintiéndonos reflejadas y reconocidas como parte de esa gran fuerza femenina que se encuentra mundialmente silenciada. Mis protagonistas no son musas sensuales, sino hermanas y compañeras.